Espín fue una dirigente política de la Revolución cubana donde participó activamente como miembro del Movimiento 26 de Julio. Ingeniera química de formación destacó en la lucha contra la dictadura de Batista. En 1958 se sumó al Ejército Rebelde, donde se destacó en la coordinación del movimiento clandestino de Oriente con el territorio del Frente y por sus acciones en el II Frente Oriental Frank País. Miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, desde 1965 hasta su muerte se encargó de la organización de la Federación de Mujeres Cubanas. Fue miembro de la Asamblea Nacional y ocupó diferentes responsabilidades tanto en el gobierno como en el Partido Comunista de Cuba.